lunes, 29 de junio de 2015

TÉCNICAS CONSTRUCTIVAS ROMANAS: LA CASTAÑUELA (2015)



LA CASTAÑUELA




La castañuela es un artilugio de hierro cuya función era el agarre de los bloques de piedra para elevarlos y colocarlos en su lugar de destino dentro de la obra.
Los romanos llamaban a este artilugio holivela o lupa (loba).
La castañuela está compuesta de por tres piezas de hierro, una central y dos laterales en forma de cuña. Las tres piezas están unidas por un pasador y forman una especie de cola de milano. Al bloque de piedra se le hace una caja interna en la cara en la que se va alojar la castañuela. Se introducen las dos piezas laterales y luego la central, se unen con el pasador y ya está listo para ser elevado con la grúa.
El hueco o caja donde se aloja la castañuela suele estar en la cara que mira al cielo con lo que las caras laterales de los sillares no tienen ninguna marca que afee su estética como ocurre con los huecos que hay que labrar para el uso de las pinzas o tenazas. En el acueducto de Segovia y en muchas construcciones romanas son visibles los huecos de agarre de las tenazas.
Las columnas cuyo fuste está construido por varios tambores utilizaban la castañuela para su colocación, incluso para elevar el fuste cuando era de una sola pieza. También se utilizaba para poner los capiteles y otros elementos delicados de la construcción.


                                                        GALERÍA DE IMÁGENES

                                                    ¡Una mirada al pasado!
                                      ¡Un paso al futuro!

martes, 24 de marzo de 2015

EXHIBICIÓN DEL OFICIO DE SERRADOR (2015)


EL SERRADOR





                                           Serradores de Arreba (BURGOS)



No en todos los pueblos había serradores por lo que algunos profesionales ejercían el oficio de forma ambulante. Pasaban por los pueblos ofreciendo su trabajo y algún vecino que necesitaba alguna viga para construir los contrataba. En otras ocasiones era el interesado el que mandaba llamar a estos profesionales para encargarles algún trabajo. También se ejercía este oficio como una segunda profesión. Siendo normalmente labradores que siendo habilidosos en el manejo del serrón, cuando las labores agrícolas se lo permitían, se dedicaban a este oficio de forma ocasional.

Para rememorar este oficio, el viernes 7 de agosto, a las 18 h. se llevó a cabo una exhibición del oficio de serrador en la plaza que hay delante del Museo. Para la ocasión se preparó el andamiaje  apropiado, varios troncos de pino y una exposición de las herramientas propias de este oficio.


La actividad estuvo dirigida por Matín Estrada, natural de Arreba (Burgos), que en su juventud practicó el oficio ayudando a su padre en el corte de vigas y tablones.

Ante el numeroso público que se congregó para asistir a esta exhibición se comenzó por descortezar unos troncos de pino con las herramientas tradicionales. A continuación se hizo una demostración de cómo manejar los tronco utilizando los ganchos y seguidamente a uno de los troncos se le hicieron las cuatro “caras” con el hacha, pasando el tronco de tener una sección circular a tenerla cuadrada, quedando de esta forma listo para que se le marcaran las líneas de corte.

Para marcar las líneas de corte se hizo un pequeño fuego en el que se quemaron varios helechos.  La ceniza conseguida se mezcló con agua y con esta sustancia se impregnó un cuerda larga que se tensó sobre una de las caras del tronco a la que se salpicó con ella  trazando varias líneas paralelas de 5 cm de separación, esta líneas serían las guías por donde hacer el corte para transformar el tronco en tablones.

Con ayuda de una polea se subió el tronco al andamio y se comenzó a serrar. Normalmente los serradores colocaban el andamio apoyado en un talud de tierra de unos dos metros de desnivel con lo que el tronco entraba en el andamio por la parte de arriba, rodando y sin gran esfuerzo.

Hubo varias personas del público que se animaron a tirar del serrón para cortar los tablones y pudieron comprobar en primera persona que este era un oficio duro y sacrificado.
También pudo participar el público en cortar rodajas a un tronco de pino que para tal efecto se había colocado en un “burro”. Fueron muchos los que se animaron a cortar su rodaja con el tronzador para poder llevarse el trofeo a casa.

Toda la actividad se desarrolló dentro de una gran expectación y con gran satisfacción para todo el público.




¡Una mirada al pasado!
¡Un paso al futuro!

 



IX TALLER DE CANTERÍA (2015)

IX TALLER DE CANTERÍA

El maestro cantero Julio Peña González dirigió el IX Taller de Cantería del 27 al 31 de Julio. El horario de trabajo fue de 17 a 21 h. 


El maestro cantero dando instrucciones.

Bajo su dirección los 12 alumnos/as matriculados pudieron llevar a cabo sus proyectos según los bocetos que habían elaborado.



El boceto y la obra.

Como viene siendo habitual se trabajó con bloques de dolomita. Esta piedra que tiene unas características muy apropiadas para llevar a cabo estos trabajaos, se extrae de la cantera que existe en Condado de Valdivielso (Burgos).


Línea de corte en la cantera de Condado.

Los alumnos tuvieron a su disposición bloques de piedra de distintas medidas para poder elegir el que mejor se adaptaba a su proyecto.


Bloques de dolomita listos para ser trabajados.

El Museo pone gran cantidad de herramientas para que los alumnos utilicen las más apropiadas al trabajo que están realizando. Para ello previamente el maestro cantero ha dado unas explicaciones básicas de sus nombres, la función de cada una de ellas y cómo se deben usar. También son muchos los alumnos que disponen de juegos de herramientas propios y que dominan las técnicas básicas de trabajo.


Conjunto de hachas y trinchantes.

El ambiente en el que se desarrolló el taller fue muy positivo, todo el alumnado estuvo muy motivado e implicado en su trabajo. Destaca especialmente el trasvase  de información de unos a otros en temas relacionados con la cantería y el mundo del arte.


 Ambiente de trabajo en el taller.

Como colofón al curso se celebró una cena de hermandad en la que se hizo entrega de los correspondientes diplomas a cada alumno.


Entrega de diplomas.

También se hizo entrega del Premio PIQUETILLA 2015 a  Fco. Javier Martínez Hermoso por su fidelidad al taller, su innovación y motivación en el trabajo, y por ser una pieza importante del buen ambiente que reina en el taller.


Fco. Javier Martínez, Premio PIQUETILLA 2015

La evaluación final del taller es muy positiva por lo que el Museo seguirá programando esta actividad el próximo año a pesar del gran esfuerzo organizativo que requiere.

¡Una mirada al pasado!
¡Un paso al futuro!

EXHIBICIÓN DEL OFICIO DE CANTERO (2015)


El día 31 de julio de 2015, de 18 a 21 h. tuvo lugar en la plaza del Museo una espectacular exhibición del oficio de cantero con el corte de un bloque de granito de tonelada y media de peso utilizando cuñas de acero y una maza.



Cortando un bloque de granito con cuñas de acero.

No menos espectacular fue el corte de otro bloque de granito, de menor tamaño que el anterior,  pero en esta ocasión utilizando unas cuñas de madera de encina. Esta demostración trataba de rememorar la técnica que ya usaban los egipcios, celtas, romanos… La técnica consiste en practicarle al bloque unos agujeros en línea llamados cuñeras en los que se alojarán unas cuñas de encina. Con la maza se meten las cuñas a presión y posteriormente se echa agua sobre ellas. Al humedecerse la madera ésta aumenta de tamaño ejerciendo una fuerte presión sobre los laterales de las cuñeras hasta que logra rajar la piedra.


El bloque se ha rajado por la presión de las cuñas de encina. 

También se hizo una demostración de cómo cortar un bloque de dolomita (carbonato de magnesio con carbonato cálcico) utilizando unas cuñas de acero de 4 mm. de grosor que realizan un corte muy limpio y no dañan las líneas de la piedra.



Cortando un bloque de dolomita.

 El público asistente pudo contemplar cómo se labra y desalabea un bloque de piedra utilizando las herramientas propias del oficio: reglas, maceta, escafilador, puntero, cincel, gradina…


Colocando las reglas para desalabear.

También se movieron piedras utilizando diferentes técnicas: palancas, rodillos, volteando, balaceando…


Desplazando un bloque de 1,5 Tm. con rodillos.

Para taladrar (barrenar) una piedra como se hacía antaño se utilizó una barra de 2,5 m. de larga terminada en cincel. Puesto de pie sobre la piedra que se quiere barrenar, el cantero golpea verticalmente de forma continuada sobre la zona donde se va a practicar el agujero. A cada golpe, gira la barra un cuarto de vuelta para conseguir un agujero cilíndrico. Alcanzada la profundidad deseada todo queda listo para que se coloque la carga explosiva.



Barrenando con barra.

Otra forma de barrenar que pudo contemplar el público asistente es la técnica llamada “a pistolete”. Consiste en que un cantero sujeta un cincel de unos 60 cm. de largo sobre la zona que se quiere barrenar mientras otro cantero golpea el cincel con su maza. Esta operación también se solía realizar golpeando dos canteros de forma alternativa. Como en la técnica anterior el que sujeta el cincel debe ir girándolo a cada golpe.



Barrenando a pistolete.

Para realizar taladros pequeños y delicados, más propios de la escultura, se utilizó un trépano (arco con una cuerda, parecido al del violín). La cuerda se enrolla a un cincel al que se le hace girar moviendo el arco hacia delante y hacia atrás de forma rápida. Este mismo sistema se utilizaba antiguamente para hacer fuego.


El arco para taladrar y para hacer fuego.

También resultó muy llamativa la forma de anclar una argolla a una piedra utilizando plomo fundido. Con esta misma técnica se colocaron dos grapas para unir una piedra que estaba partida por la mitad.

     

Fijando una argolla con plomo fundido.

Otra actividad que llamó mucho la atención fue la forma de levantar piedras utilizando una reproducción de una grúa romana a la que se le pusieron distintos tipos de poleas y polipastos. Para coger la piedras se usaron las típicas tenadas de dos ganchos, la castañuela u holivela, las pinzas interiores…


Levantando una piedra con las tenazas romanas.

Fueron muchos los asistentes que estuvieron viendo y disfrutando de las demostraciones que para muchos de ellos eran desconocidas. Parte del público pudo participar activamente en la realización de alguna de estas actividades. Toda la actividad resultó interesante y positiva dando una visión bastante completa de lo que era el oficio de cantero. Este oficio tan importante en otros tiempos actualmente está en franco retroceso.


El público siguió muy atento  toda la demostración.

 
¡Una mirada al pasado!
¡Un paso al futuro!